solsticio de verano

solsticio de verano

jueves, 25 de noviembre de 2010

CAPÍTULO 82

CAPÍTULO 82. MÁGICO Y PRECIOSO.








Ninguno de los dos lo pudo evitar, ambos sabíamos que por más que nos negásemos terminaría pasando. Nos besamos. Fue un beso igual de mágico o incluso más que el primero. Lleno de fuerza, de sentimientos muy profundos que los dos sentíamos el uno por el otro. Sus labios eran más dulces y cálidos de lo que los recordaba. Su mano acariciaba mi cintura y la mía su brazo, suave como el terciopelo y fuerte, muy fuerte. Estuvimos besándonos bastante tiempo, nuestras respiraciones iban entrecortadas, a causa de no querer parar de sentir eso que estábamos sintiendo, al no querer separar nuestros labios. No quería dejar de saborearle, de notar su lengua recorriendo cada rincón de mi boca, de sentir el calor que desprendía su cuerpo, de notar cada una de sus caricias, de tocarle y sentirme la chica mas feliz del universo. No quería que eso acabara. Pero acabó.
Dani se separó de mí y me cogió la mano mirándome a los ojos. Parecía algo triste.
Pero, ¿por qué está triste si esto que acaba de suceder es lo mejor que me ha pasado en la vida?- pensé.
Pero luego me di cuenta de que esto que tan bien me había hecho sentir, no se debía haber producido. Me di cuenta de que tenía un novio al que quería muchísimo, y de que al chico al que acababa de dar el beso más alucinante de mi vida era mi mejor amigo.
Nos mantuvimos muy cerca el uno del otro, mirándonos a los ojos y agarrados de la mano. Mi corazón no quería que este momento terminase, pero mi cabeza no hacía más que recordarme a Toni.
Me solté de su mano y me di la vuelta dándole la espalda. Me sentía en parte bien y en parte mal por lo que había pasado.
Una lágrima se deslizó por mi mejilla, una lágrima que intentaba liberarme de todo lo que estaba sintiendo por Dani, cosas que ya sentía, pero que no habían salido a la luz.

Tras mucho pensar, me di la vuelta de nuevo. Dani estaba ya dormido, parecía un ángel bajado del cielo. No me pude resistir, me incorporé un poco y le di un dulce beso en la mejilla. Por mucho que hubiese pasado entre nosotros, no dejaba de ser mi mejor amigo.

Apoyé mi cabeza en su pecho, como ya había hecho otras veces. Le miré la cara, sus ojos cerrados y su sonrisa que aún mantenía incluso dormido, me producían un intenso sentimiento de amor.
Así, en esa postura, me quedé dormida, pensando solo en él.


A la mañana siguiente, cuando me desperté, Dani no estaba en la cama, su lado estaba totalmente vacío.
Me levanté y sin cambiarme de ropa salí de mi cuarto. El pasillo olía a churros, sonreí al darme cuenta de que mi abuela estaba en la cocina haciendo mi desayuno preferido.
Fui al baño y me lavé la cara, al menos tenía que estar presentable. Me puse el bikini y me apresuré a ir a la cocina, donde efectivamente y tal como yo había supuesto, estaba mi abuela friendo churros congelados.

- ¡Hola abuela! ¡Qué buena pinta tienen esos churros!
- Aurora, por fin te has levantado, todos te esperábamos para desayunar.
- ¿A mí? Pero si nunca me esperáis.
- Esta era una ocasión especial.
- ¿Y Dani?
- Está ayudando a tu abuelo a cortar el césped, no lo recordaba tan majo y tan colaborador. Es un buen partido, Aurora.
- Ya lo sé, abuela, pero es mi amigo y ya sabes que no quiero perderle. Además ya he sufrido mucho.
- Hija, déjame que te de un consejo. Lucha por lo que verdaderamente quieres, porque una verdadera luchadora siempre gana, nunca pierde.
- Gracias abuela, pero no se si eso va a funcionar conmigo.
- Contéstame a una pregunta. ¿Le quieres?
- Mucho, como amigo.
- ¿cómo algo más? A mi no me puedes mentir hijita, lo sabes.
- Sí abuela, lo sé y también se que no me puedo quitar de la cabeza sus ojos, su sonrisa, su manera de tratarme, su forma de ser. Pero no puedo convencerme a mí misma de que estoy completamente enamorada de él, porque eso solo me dañaría. Se va a Londres cinco años, y eso es demasiado para mi corazón.
- Te entiendo.- me abrazó muy fuerte.- ¿sabes? Siempre he dicho que nos parecíamos, pero no me daba cuenta de hasta qué punto. Eres igual de romántica que yo.
- Es un orgullo parecerme a ti.
- Y a mi me emociona que me digas esas cosas.
- Pero no llores que nos conocemos.- en vez de llorar, ambas reímos. Me puse a ayudarla con los churros sin darme cuenta de que aún estaba con el camisón corto de flores de mi madre.






PARTE NARRADA POR DANI.





No me había dado cuenta de que había dicho esas palabras en alto, hasta que Aurora se dio la vuelta con un brillo en los ojos demasiado potente.
La miré, no podía dejar de hacerlo. Y al final terminamos fundiéndonos en un precioso beso.
Cuando nos separamos, añoraba sus labios, el tacto suave de su piel de porcelana, sus ojos mirando los míos, su mano recorriendo mi brazo.
Ella se dio la vuelta y yo no pude evitarlo, sabía que había hecho mal en besarla, ella tenía novio.
Cerré los ojos para relajarme e intentar dormirme para soñar de nuevo con sus labios. Al poco tiempo de haberlos cerrado, noté como Aurora se incorporaba y me daba un beso en la mejilla. Un beso que no sabía qué significaba. No quise abrir los ojos, era demasiado bonito tenerla tumbada en mi pecho, notar su pelo rozando mi cara. Quizás ya había empezado mi sueño y tenía miedo de abrir los ojos por si desaparecía esa sensación.

Cuando al fin me desperté, ya por la mañana, Aurora estaba tumbada pegada a mí, durmiendo plácidamente, con una sonrisa en los labios.
Me levanté con mucho cuidado de no despertarla, me vestí y salí para echar una mano al abuelo de Aurora.
Le di los buenos días a su abuela, a su abuelo y a su tío, que ya estaban levantados y empezando a hacer las tareas de la casa.
Tras haberles saludado, me dirigí al jardín de atrás, donde estaba Marcos.

- ¿puedo ayudar en algo?- le pregunté.
- Pues claro. Si quieres te enseño a cortar el césped y así me echas una mano.- me dijo Marcos con una sonrisa muy amistosa.
- Estaré encantado de aprender y así poder hacer algo.

Y así, Marcos me fue enseñando a cortar el césped con una máquina bastante moderna. Pasé bastante tiempo cortando césped, con ayuda de Marcos y cada vez lo hacía mejor, según me decía él.
Ya cansado, después de pasar todo el jardín de atrás, con el sudor en la frente a causa del terrible calor que hacía, subí a la cocina a por una botella de agua para Marcos y para mí.
Antes de entrar, me paré un momento. Aurora estaba dentro de la cocina hablando con su abuela. Era sin duda ella, no confundiría su voz armoniosa con ninguna. No pude evitar oírla.
Había dicho que me quería, que estaba enamorada de mí, pero que no quería sufrir más por mi marcha.
La entendía perfectamente, era justo lo mismo que me pasaba a mí, solo que yo no podía evitar sentirme atraído por ella, quererla como a ninguna chica había querido. Ella en cambio tenía a Toni, que estaba ahí para ella, que la quería y que no se iría a ningún lado cinco años.

Sabía que la tendría como amiga, pero yo la quería mucho más que eso. Estaba celoso de Toni, mucho, porque él la tendría el tiempo que yo no estuviese, disfrutaría de sus besos, de sus abrazos, de su vitalidad, de su valentía, de su cariño, de su simpatía, de su infinito amor.

5 comentarios:

  1. holaa! soy seguidora tuya desde julio y estaba deseando que pusieras el siguiente capítulo. Ha merecido la espera, me ha encantado :) Ojalá demostraran el amor que sienten el uno por el otro. Pasate por mis blogs y me dices que tal:

    www.lavida-cambia.blogspot.com
    www.entrelassombras-bea.blogspot.com

    Publica pronto ;)
    Besosss

    ResponderEliminar
  2. oooooooo adoro este capitulo, ke bonitooooo!!!!!
    me encanta Dani!
    Te echaba de menos =( estaba deseando leer otro e tus capitulos, espero ke esta vez no tardes tanto...
    un besazo!!!!!

    ResponderEliminar
  3. sigue scribiendo =)
    tarde 2 dias en leerm todos los capitulos pero m los lei =)
    sigue andaaaaaaaaa ^,-,^

    ResponderEliminar
  4. Aaaaay! Acabo de terminar de leer tu historia... y la verdad... ME ENCANTAAA! Pero, POR FAVOR subi mas entradas! Es lo mejor! No quiero que Dani se vaya! :(
    Un beso!
    Paau

    ResponderEliminar
  5. sube pronto me he quedado con el gusanillo:)

    ResponderEliminar